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Los grupos de Gurdjieff en mi vida. Encuentro del origen de todos los caminos, el encuentro conmigo


"Todo hombre le teme a algo. Nosotros creamos a nuestros propios demonios" Wanda Maximoff/Scarlet Witch...

Yo debo reconocer que me siento incómoda, muy incómoda. Hace 20 años creí que estaba tranquila y en paz porque habíamos vencido las sombras que nos amenazaron y se cumplió un ciclo, nunca imaginé que se abría otro como forma recurrente de expresión cósmica, al renovar una y otra vez, posibilidades de despertar a la condición humana, cada vez con más fuerza y dificultades. Hoy en la era de avances tecnológicos, una vacio de alma se siente, hay una ignorancia muy grande, pues se fragmentaron todos los grandes sistemas de pensamiento, con el riesgo de entronizar el EGO ya que cada quien se cree poseedor de la verdad primera y última, sin el compromiso de cambiar y ordenar la vida en lo cotidiano.Me habían enseñado a estar atenta a la acción del ángel sobre nuestra condición humana, idea que me había costado mucho entender, ya que me habían enseñado en la catequesis del colegio, que Dios creó a los ángeles como espíritus puros, todos se encontraban en estado de gracia. No dimensioné hasta entrar en "Los Peregrinos" y leer el Mensaje a los Hombres de la Nueva Tierra, que algunos,d ellos encabezados por Luzbel, el más bello de los ángeles, por su malicia y soberbia se negaron a adorar a Jesucristo, Dios hecho hombre, por sentirse seres superiores. Así, rechazaron eternamente a Dios con un acto inteligente y libre de su parte. No aceptaron que el Verbo encarnado tomara la condición humana para su expresión, por lo que se levantaron en franca rebeldía, siendo arrojados al vacío de la oscuridad, después de una intensa lucha con las huestes celestiales encabezadas por San Miguel Arcángel, de ahi que comprendí que el ángel siempre tratará de ejercer su influencia sobre el hombre, para demostrar su debilidad y cumplir su misión de dividir a los humanos para que reine el caos y se establezca la oscuridad sobre nosotros. Cuando vi las series de ciencia ficción a la que he recurrido para explicar asuntos esenciales a través del recurso del cine, y su poder sobre el inconsciente colectivo, vi como eso que fue comprendido por mi en los 80, estaba siendo comunicado a todos en las series conocidas y de alta popularidad.

¿Quién cómo Dios? era la pregunta que debajo de una inmensa escultura colocada sobre la entrada del Internado "San José de Tarbes" en El Paraíso, Caracas, me recibió desde que ingresé muy niña a estudiar a ese colegio de hermanas tarbesianas de Lourdes,y me despidió cuando salí graduada de Bachiller en 1969.

Dese 4° grado formé parte de los grupos de catequesis que estaban estructurados en el colegio, y reconozco que de las Sagradas Escrituras nada sabía, pues había sido formada en Historia Sagrada, forma muy elemental de presentarnos pasajes de la Biblia, sin mayores trascendencias, tanto que yo misma servía de "maestra" pues los sábados, día de limpieza del salón y entrega de notas, preguntaba a mis compañeras las lecturas fijadas. Esa realidad es un gran vacío en nuestra formación, a pesar del prestigio del colegio en otras áreas de enseñanza, que reconozco magníficas, pero en esa parte básica no lo fue. Salimos a trabajar en los barrios como nos decía el Catecismo, como guerreros de la Iglesia Militante, y en plena década de los grandes cambios, nos formamos sólo nutridas por estudios sociológicos, históricos, y temas muy en boga en esos años que como su música "conmovieron al mundo", como oimos al Duende Azul Escalante. Cada quien decidió seguir una línea en esos años 1968-1969 los años en que la izquierda se quitó el disfraz, según lo narra muy bien el escritor margariteño Francisco Suniaga en artículo en PRODAVINCI 26/09/2018. No fue fácil salir bachiller en esos años a un destino extremadamente complejo.

Nos dice Suniaga: "La izquierda ejerció sobre mí y los amigos de la adolescencia, con quienes más me relacioné, una fascinación agobiante. Eran los años sesenta, los de la irreverencia juvenil a escala mundial y no hubo una mayor que aquélla de los muchachos venezolanos que tomaron las armas por unos ideales que promovían la igualdad y la extinción de los egoísmos humanos. En aquellos tiempos era imposible para nosotros siquiera imaginar cuán mortalmente errónea fue esa decisión ni cuán alto el precio a pagar. Menos siquiera suponer cuán cruel y horrible es la verdad que desde siempre se ha escondido detrás del sueño comunista.

El hecho de que esa generación de prometeos hubiese sido derrotada política y militarmente, lejos de liquidar, aumentaba nuestra ensoñación. Su sacrificio tendía sobre ellos y sobre la izquierda criolla una pátina de romanticismo que constituía un imán muy poderoso para las almas juveniles más sensibles. Éramos entonces nosotros una sociedad de poetas quinceañeros que hasta culpables nos sentíamos por no haber sido parte de aquella épica que considerábamos de incuestionable moralidad y justicia. Izquierda, comunismo y humanismo conformaban en nuestras mentes febriles una entente admirable de la que queríamos ser parte.

Y en eso, llegó 1968, el año que lo cambió todo. Comenzó en la muy lejana Checoslovaquia, en enero, con un hecho en apariencia rutinario: la llegada al poder de Alexander Dubcek. Un burócrata comunista que se apartó de la nomenklatura roja y pretendió implantar en su país formas de izquierdismo incomprensibles para los propietarios feudales de la franquicia, el Partido Comunista de la Unión Soviética. Su intento contó con la simpatía inmediata de los espíritus libres del mundo y con el aborrecimiento de los comunistas ortodoxos.

Esa esperanza nacida en Praga coincidió en mayo con el movimiento encendido por los estudiantes en París contra l’ancien régime gaullista. Parecía entonces que una generación mundial de jóvenes, a uno y otro lado de la línea divisoria de las ideologías, se había levantado contra lo viejo, lo feo y lo injusto. Cómo no identificarnos y sentirnos parte de aquel movimiento, aunque todavía fuésemos muy jóvenes y, además, viviésemos en una isla remota en el Caribe.

A finales de junio, Charles De Gaulle, un demócrata al fin y al cabo, liquidó la revuelta parisina ganando de manera contundente las elecciones legislativas que él mismo había convocado para darle a los franceses la posibilidad de escoger entre su gobierno y la revolución juvenil. En agosto, los soviéticos y sus aliados, a la manera comunista, hicieron lo propio en Checoslovaquia, pero a su manera. Como ya había ocurrido en 1956 en Hungría, sin más miramientos y ante el estupor del planeta, entraron con sus tanques hasta Praga y segaron lo que había sido una hermosa primavera. La efervescencia juvenil en Europa había terminado, aunque sus efectos prendieron en el resto del planeta por varios años y, aparte de identificar para siempre a una generación, cambiaron al mundo.

El episodio que cerró el ciclo de Praga y conmovió nuestras almas de jóvenes simpatizantes de la izquierda ocurrió en enero de 1969. Un muchacho checo, Jan Palach, se roció de gasolina y se prendió fuego en la plaza San Wenceslao. Quiso con su gesto condenar la invasión soviética y, en términos expresos en una carta de despedida, la actitud colaboracionista de muchos conciudadanos suyos –“enchufados” han habido y habrán en todas partes y en todos los tiempos–. Esa inmolación abrió en nosotros una interrogante obvia: ¿cómo podía ser buena una ideología, y el partido que la representaba, si provocaba con sus acciones que un joven de 20 años, apenas unos pocos mayor que nosotros, por pura impotencia, se convirtiera en una tea?

Con lo ocurrido, la entente admirable en la que habíamos llegado a creer se había roto de manera definitiva. Los autores de la tragedia, los comunistas rusos y sus seguidores, y en particular los del Partido Comunista de Venezuela, no eran los izquierdistas que (en aquella época) soñábamos con ser. Nuestra intuición era poderosa –definitivamente no queríamos ser parte de aquella monstruosidad–, pero carecíamos de los recursos políticos y lógicos para darle la conceptualización que reclamaba nuestra racionalidad occidental.

En esos mismos tiempos apareció la guía que necesitábamos. Un político venezolano, miembro aún del Comité Central del Partido Comunista de Venezuela, conocido, odiado y querido por su pasado guerrillero, escribió un libro que mandó al carajo al partido y desmontó argumento por argumento la farsa comunista. Su nombre: Teodoro Petkoff. Por ese hecho, y por muchos otros a lo largo de su carrera política, ha merecido desde entonces mi inquebrantable admiración y simpatía.

NOS COLOCAMOS EL MUNDO SOBRE LOS HOMBROS, COMO ATLAS, PERO SIN TENER PISO SÓLIDO, SOLO NOSOTRAS ANTE UNA REALIDAD COMPLICADA.

Con Checoslovaquia, el socialismo como problema (1969), Petkoff insurgió en otro plano, en el de líder e ideólogo de una nueva izquierda. En ese libro, tomando como referencia argumental la invasión a Checoslovaquia, condenaba a la Unión Soviética y rechazaba la ortodoxia comunista. El impacto de su obra trascendió las fronteras nacionales y fue un manual para las nuevas generaciones de los izquierdistas en el continente. Tal fue su influencia internacional que el propio Leonid Brehznev, secretario general del Partido Comunista de la extinta URSS, lo declaró enemigo del proletariado (junto con el francés Roger Garaudy y el austríaco Ernest Fischer, quienes, como él, eran parte de los comités centrales de los partidos comunistas de sus respectivos países y publicaron aquel mismo año obras condenando la invasión y denunciando al comunismo soviético por antidemocrático y antihumanista).

Las ideas de Teodoro Petkoff fueron fuente para el nacimiento en Venezuela (enero de 1971) de una hermosa esperanza, el Movimiento al Socialismo, capítulo venezolano del socialismo democrático. Esperanza que se distorsionó y quedó trunca porque, como quedó demostrado a la vuelta de los años, los tiestos no salen a las cazuelas (vale decir las ideas son una cosa y su instrumentación humana otra distinta). Dicho de la manera más sencilla, los sueños de la izquierda, en todas las épocas y lugares, y cualquiera que haya sido el disfraz utilizado, han terminado en la misma horrible pesadilla de autoritarismo, persecuciones a la disidencia, empobrecimiento y corrupción, mucha corrupción".

Me confieso, como lo he dicho siempre en este blog, que no fui de izquierda nunca, debido a la formación sui generis que obtuve en mi casa, donde habia un sacerdote elevado a Monseñor, que trabajaba sin tantas exquisiteces teóricas, y además de montarse en un tractor y dar clases todo el día, celebraba la Misa y rezaba la Liturgia de las Horas con un Breviario en latín, cosa que me daba mucha seguridad, y había entregado toda la parafernalia de color morado, propia de su investidura eclesiástica, a unas monjas carmelitas para que la guardaran, pero si me interesé mucho en el Concilio Vaticano II, concilio ecuménico de la Iglesia católica convocado por el papa Juan XXIII, quien lo anunció el 25 de enero de 1959. Fue uno de los eventos históricos que marcaron el siglo XX. El Concilio constó de cuatro sesiones: la primera de ellas fue presidida por el mismo papa en el otoño de 1962. Él no pudo concluir este Concilio ya que falleció un año después, (el 3 de junio de 1963). Las otras tres etapas fueron convocadas y presididas por su sucesor, el papa Pablo VI, hasta su clausura en 1965. La lengua oficial del Concilio fue el latín. Comparativamente, fue el Concilio que contó con mayor y más diversa representación de lenguas y etnias, con una media de asistencia de unos dos mil padres conciliares procedentes de todas las partes del mundo. Asistieron además miembros de otras confesiones religiosas cristianas.Se pretendió que fuera un aggiornamento o puesta al día de la Iglesia, renovando los elementos que más necesidad tuvieran de ello, revisando el fondo y la forma de todas sus actividades. Pero confieso que seguía sin sentirme bien, algo faltaba por dentro, y asi llevé mi vida de trabajo y estudios hasta llegar a Valencia, después de un periplo que ya he contado, sintiendo que la institución eclesial, al carecer de bases profundas lo que sabía no me llenaba, además era una profunda creyente en Dios, me gustaba mucho Jesús de Nazareth y ansiaba encontrar un camino que me permitiera sanar mis heridas y reorientar mis propias sombras.

Llegué a Valencia (Edo. Carabobo) en 1974, me casé y durante esa década me centré en tener mis hijos y comenzar la vida según mis propias inquietudes.

Quiso Dios que conociera a Cristina Araujo, nombre que ya había integrado con la joven exquisita a quien había comenzado a admirar en mi adolescencia al verla en la pantalla televisiva los jueves a las 8 pm. en el programa “Primera Fila” que conducía Eladio Lares en TVN 5, luego con Renny Ottolina en su programa “Renny presenta”, cuando con su bella voz interpretaba canciones venezolanas y populares latinoamericanas, iniciando la moda de las cantantes que le siguieron: Soledad Bravo, Cecilia Todd, Esperanza Márquez, entre otras, después que en 1972 en la sede de dos prestigiosas publicaciones culturales: “Revista Nacional de Cultura”, la más antigua de ellas editada desde 1938, e “Imagen”, dos grandes poetas carabobeños, directores de las mismas respectivamente: Vicente Gerbasi (Canoabo, 2 de junio 1913-Caracas 28 de Diciembre de 1992) y Pedro Francisco Lizardo (Bejuma, Carabobo 1920-Caracas 2001) en la oficina pequeña y cálida del Departamento de Literatura del Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes (INCIBA), dirigido por otro hombre de letras: Francisco Pérez Perdomo (Boconó, Trujillo, Venezuela, 1930 - Caracas, Venezuela, 26 de mayo de 2013) había escuchado una conversaban en la que con especial cariño y palabras muy hermosas llenas de reconocimiento y admiración se referían a una “gran dama valenciana”…Cristina Araujo según me contestó el poeta Gerbasi.

Inicié una gran amistad con Cristina que me llena continuar en el presente, y de su mano conocí a su prima, la inolvidable y querida Morella Lizarraga de Ortega, quien invitó a participar en un grupo al que pertenecía su hermana Maruja, basado en las enseñanzas de G.I. Gurdjieff, el cual mostraba un camino espiritual que no aisla a los hombres de la vida, sino que trata de encontrar una respuesta al sentido de la misma, al estar en estado de presencia a si mismo y los demás.

¿Qué es el Cuarto Camino?

Por primera vez el grupo se reunió con unas 25 personas en el Country Club de Valencia, los instructores o responsables venían de Caracas los jueves a las 10 am. Ellos fueron: Vicente Valentini, Maruja Lizarraga, Manuel Menhard, Rosario Salón de Montenegro y su hermana Gisela Febres Cordero, a los pocos meses vino Jim Nott para introducir al grupo en los movimientos, que son parte muy importante de la enseñanza del 4° Camino, como llamó Gurjieff a su propuesta, éstos exigen la participación de una presencia en movimiento. Son una sucesión estricta de posiciones que nos pueden conducir a sentir una energía nueva, una conciencia desconocida para mi, a la cual no estaba acostumbrada.

Gueorgui Ivánovich Gurdzhíyev Alexándropol, 14 de enero de 1866 – Neuilly-sur-Seine, 29 de octubre de 1949) fue un maestro místico, escritor y compositor armenio.Formuló la Doctrina del Cuarto Camino, con múltiples orígenes en diversas tradiciones (budismo, sufismo, hinduismo, cristianismo ortodoxo oriental). Hay tres caminos: el camino del fakir, el del monje y el del yogui. Más allá de estos tres caminos, hay un Cuarto Camino. Según Gurdjíeff, esta idea data de tiempo inmemorial y no es una idea original suya. El Cuarto Camino nunca empieza en un nivel inferior al de un buen padre de familia, porque requiere la responsabilidad de una persona que vive en el mundo y se enfrenta a los quehaceres cotidianos sin la necesidad de abandonar el mundo, como sucede en los otros tres caminos. El Cuarto Camino requiere que la persona trabaje sobre el intelecto, las emociones y el cuerpo físico. En el Cuarto Camino, la función sexual es la más importante. Según Gurdjíeff, la energía sexual es la más poderosa que produce el organismo, sin la sublimación de la cual no se puede lograr el despertar.

Esta serie de pequeñas y simples recomendaciones son el principio básico para quienquiera que busque tranquilidad mental.

Gurdjieff llegó a Rusia en 1912, después de haber pasado tiempo en África y Asia, y trajo con él una enseñanza que no era ni una religión ni una filosofía, sino una enseñanza practica para ser vivida. Llamó a su enseñanza "El cuarto camino"; nombrado así porque no era el camino del faquir, el del monje o el del yogui. De acuerdo a él, la humanidad ha entrado en un periodo precario en su evolución, y el mundo va a colapsar de no ser que la "sabiduría" del Oriente y la "energía" del Occidente se reúnan y se usen armónicamente. Su formidable legado de enseñanzas es uno de los más sensatos y adaptables a la vida moderna de este lado del mundo.

Totalmente ignorante en esos temas, me gustó lo que decían: «Gurdjíeff mostró que la evolución del hombre [...] es el resultado del crecimiento [y desarrollo] interior individual; que tal apertura interior es la meta de todas las religiones, de todos los caminos, [...] pero que requiere un conocimiento directo y preciso, [...] pero que sólo se puede adquirir con la ayuda de algún guía con experiencia y a través de un prolongado estudio de sí y del trabajo sobre sí mismo»

Sabemos que gran parte del tiempo estuvo en Asia Central, países árabes, Tibet e India, no se sabe cómo consiguió el contacto con el Monasterio Sarmung, del cual se decía fue construído 2.500 años antes de Cristo. Tuvo que viajar 12 días con los ojos vendados para que no reconociera el camino, alli estudió las milenarias danzas sagradas entre otros conocimientos.En 1912 llega a Moscú luego de pasar más de 20 años de travesías, donde comienza a reunir un grupo de alumnos y forma el Instituto para el Desarrollo Armónico del Hombre. Conoce a la condesa Julia Ósipovna Ostrowska, quien como prima de Alejandra era dama de la corte real de los Románov. Ella era rusa de origen polaco y sus padres fueron Ósip Ostrowski y Marie Fédérowska Misich.

En 1914 aparece Vislumbres de la Verdad, el primer relato (anónimo) sobre el pensamiento de Gurdjieff (bajo su supervisión).

Gurdjieff spiega cos'è la quarta via. Brani da: "Frammenti di un insegnamento sconosciuto" di P.D. Ouspensky.

En 1915 conoce a Piotr Ouspenski, luego los contactos entre ambos son esporádicos. Ouspenski se convirtió más tarde en el principal difusor del Cuarto Camino en occidente (EUA, y Europa).

El grupo de estudiantes se desplaza debido a la Revolución rusa. En 1917 viaja hacia Essentukí (Cáucaso) y se produce una segunda fundación del Instituto. Luego, en 1919, el grupo (la Sra. J.O. Ostrowska, los Stjoernval y los De Hartmann más Alexandre y Jeanne de Salzmann, padres de la señora Nathalie con quien tuve mucha empatía y es la madre del Dr. Sergio Laignel Lavastine, psiquiatra, primero que conozco en mi vida, y me ayudó a afrontar un momento muy trascendental en mi vida desde 1983 hasta 1994 ) parte hacia Tiflis(Georgia), donde se produce una tercera fundación del Instituto. Después, por problemas políticos parten hacia Constantinopla, donde son recibidos por Ouspenski. Pasado un tiempo se separan y el grupo viaja a Berlín y luego a Londres, sin buenos resultados y finalmente se asientan en París.

En 1922, compran el Château du Prieuré (Fontaine Blue) a la viuda de Maitre Labón el abogado de Dreyfus, cerca de Fontainebleau, en París, donde se reabre su Instituto para el Desarrollo Armónico del Hombre. Acondicionan la mansión para poder realizar sus prácticas (con un gimnasio y un teatro) y aparece la casa de estudios (Study House). Ellos son los filósofos del bosque. Los esposos Salzmann se encargan de la "publicidad" de Gurdjíeff en los círculos franceses.

A fines de 1923 se estrena públicamente en el Théâtre des Champs-Élysées los movimientos y danzas sagradas con el nombre de "La Lucha de los Magos", que se practicaban en la casa y con éxito impresionan al público.

Me enamoré de estos movimientos. Hoy me hacen falta. Antes que en el Tarot u otra técnica aprendí el valor del "loco" arcano de gran importancia y de gran significado en la búsqueda interior.

Encuentro con hombres notables. Peter Brook, 1979

LOS OTROS CAMINOS. "Encuentro con hombres notables", película basada en libro homónimo de George Ivanovitch Gurdjieff: "El hombre vive un mundo subjetivo del cual le es imposible escapar". Obviamente algo hemos perdido de vista para crear el mundo que hemos creado; no se requieren más conocimientos que poder mirar la realidad para darse cuenta.

El verdadero significado del trabajo de Gurdjíeff es fuente de discusión. Igualmente es reconocido como un maestro carismático, que fundamentalmente desarrolló un conjunto de atrayentes ideas místicas y esotéricas, lo que me atrapó fue la base de sus investigaciones sobre métodos y enseñanzas elaboradas por sociedades secretas o esotéricas, que datarían de tiempos inmemoriales, para preservar conocimientos arcanos y beneficiosos para facilitar el desarrollo de las potencialidades humanas, como un estado superior de conciencia y la prolongación de ésta más allá de la muerte. Gurdjíeff presenta conceptos en Europa Occidental, como por ejemplo el Eneagrama del Cuarto Camino, que fueron muy poco difundidos dentro de ésta, ya sería por cuestiones políticas o por motivos religiosos, luego estando en la Abadía "San José" de Guigue, a través del P.Beda Hornung,osb. aprendí esa propuesta sufí, que en los grupos no nos la daban aunque era la base del trabajo de los maestros con nosotros No olvidré el gran y completo gráfico que tenía la sra. Nathalie en el comedor de su casa en Club de campo (Edo. Miranda) Gurdjíeff supo cautivar y atraer la atención de personalidades prominentes de su tiempo que decidieron estudiar sus difíciles métodos y parece ser que lo hicieron con seriedad y por largos periodos de tiempo. Este es el caso del famoso arquitecto norteamericano Frank Lloyd Wright. Remedios Varo, Eva Sulzer y Leonora Carrington eran también seguidoras de su doctrina, impartida por su discípulo Ouspensky. La poetisa Katherine Mansfield y el admirado Rene Daumal. Me apasionaron tanto Gurdjíeff como sus métodos, a pesar de muchas vicisitudes y de sus detractores, cuentan con muchas publicaciones y exhibiciones en diferentes partes del mundo. Incluso se ha filmado una película que describe la búsqueda, casi arqueológica, que emprende Gurdjíeff en pos de la verdad, que él se proponía encontrar en los conocimientos y tradiciones que atesorarían los antiguos templos y monasterios del Asia, además de sus interacciones con personajes con quienes él se encontró a lo largo de esta travesía; el film se basa en la segunda serie de sus escritos y comparte el mismo nombre: Encuentros con hombres notables, película dirigida por Peter Brook, director reconocido que habia visitado Venezuela y habia realizado un montaje teatral maravilloso en el Ateneo de Caracas, por tanto me sentía como pez en el agua en Caracas y cuando me invitaron a ir el último fin de semana a Paracotos, una extensión de terreno muy grande que hacía 40 años no era más que una vaquera y dormían en carpas. Entre todos los grupos, comenzaron a hacer galpones para mujeres, niños, hombres, cocina, baños, todos hechos por los integrantes. Esa experiencia la vivi nuevamente en los grupos que se reunían en torno a Josefina Chacín Ducharne y el "Mensaje a los hombres de la nueva tierra" y al filósofo J.R. Guillente Pérez, gran amigo del Dr. Sergio Laignel Lavastine. En los grupos de Gurjieff me encantaba que a la vivencia exterior, donde a veces lloraba de impotencia, por ver mis limitaciones, debía observarme y vencer poco a poco esa incapacidad, soltando las tensiones, sintiendo el cuerpo relajado, tratando de tener la sensación de mi y estar presente a mi misma, utilizando también una palabra que me volviera al aqui y ahora cuando mi mente divagaba pues las tareas eran acompañadas de una tarea interior, que se nos daba para el fin de semana o cada dia. Aprendí a tener como primera actividad del día meditar, con la posición de mi cuerpo recta, en la que la columna vertebral debe estar vertical como un eje, los pensamientos que me acosaron al principio no se deben tomar en cuenta, ni pelear con ellos, solamente dejarlos pasar, las tensiones van cayendo. Me abro al sentido de Algo Superior, es necesaria la tranquilidad, que se va adquiriendo con movimientos lentos, con paciencia, es el acto de presencia de mi misma, quiero someterme a la voz interior, al sentimiento de lo Divino, de lo Sagrado. Eso que tanto buscaba, más allá del trabajo catequístico en los barrios, donde hasta me enfermé de sarampión, que al ver la realidad de los supuestos pobres del Evangelio, me hacía sentir una gran impotencia. En ese estado contemplativo se que Dios está en mi, puedo pedir su ayuda, puedo decir "Señor ten piedad". Más adelante con los monjes benedictinos asumí una integración mayor, había encontrado un Centro común a los grandes mensajes espirituales.

Gurdjieff decia que el YO interior, el mas profundo, el YO UNICO que NO se fragmenta y que se conecta con el Embrion de Alma que poseemos...ese NO debe ser combatido ni eliminado...los yoes que deben ser observados y eliminados sin piedad si se quiere avanzar en el camino del Despertar de la Consciencia Profunda son...los yoes EXTERNOS de la PERSONALIDAD EXTERNA; pues Gurdjieff decia que el hombre en terminos psicologicos puede y debe ser considerado como un ser que tiene una Personalidad EXTERNA formada por una multipilicidad de yoes caprichosos, egolatras, fanfarrones, contradictorios, injustos, cambiantes etc apoyados en las enseñanzas de la vida, los falsos conocimientos, las verdades de perogrullo, los prejuicios, las influencias de las modas, las costumbres sociales y del entorno etc etc y en las Emociones Negativas que los manejan tales como la envidia, los celos, el rencor, la violencia, la apatia, la falsedad etc....a esos MULTIPLES YOES NEGATIVOS de la PERSONALIDAD EXTERNA hacia Monsieur Gurdjieff clara referencia que debiamos atacar y desmantelar y eliminar de nuestras mentes, de nuestro Centro Mental....y finalmente, me permito agregar un detalle concerniente a la enorme cultura general que Gurdjieff poseia: no la obtuvo unicamente de viajar por antiguos monasterios y extraños parajes de medio oriente, etc etc sino que gran parte de su bagaje cultural lo obtuvo en la pequeña ciudad de Kars, donde paso años de su infancia , fue alli donde conocio al sacerdote Borsch, a quien le dedica un capitulo entero en su libro "Encuentros con hombres notales"y ese sacerdote catolico, que poseia una gran cultura y una gran biblioteca fue quien noto que Gurdjief no era un niño comun y corriente sino que era muy inteligente y perspicaz comparado con el resto de los otros alumnos de la escuela a la que concurria, y por ello fue poco a poco leyendole libros de religion, teologia, ciencias etc , y Gurdjieff empezo a mostrar notable interes por leer y estudiar cuanto libro llegaba a sus manos, todo le interesaba, desde religiones del mundo hasta tratados de geometria, hasta libros de geografia o de idiomas....

Esa búsqueda que habia visto reflejada de forma excelsa en obras que leí durante mi carrera de Letras y Filosofía y en el cine, halló un Centro con mi encuentro con los grupos de Gurdjieff y la Cosmobiología, de la mano de Fantina Iribarren y la Gran Fraternidad Universal.

El filo de la navaja - conversación con el sabio.

En este fragmento de la Pelicula "El Filo de la Navaja" el hombre que se busca a si mismo y busca aprender , visita al Sabio Indú , se siente irresponsable , no acuerda con los valores que todos aceptan , el hombre sabio se alimenta de su interior sabe que solo alli encontrara la felicidad .

La conversacion del sabio , lo lleva al protagonista a mostrale los tres caminos ....

En mi encuentro con los grupos de Gurdjieff algo hermoso explotó en mi, después tantos años de angustia por sentir mi vacio interior, abandonada de Dios, lo encontré de nuevo, mi vida cambió, comencé a sentirme en su presencia y a sentir que esa experiencia presagiaba una conversión, cosa que sucedió en 1992 en la Abadía Benedictina "San José" de Guigue, la noche del 17 de febrero de 1992, en la habitación N° 7 bajo el nombre de Santa Otilia, la patrona de la orden benedictina que está en Guigue, de origen bávaro, alemán, quien ciega recuperó la vista al encontrarse con el gran amor de Dios, como me estaba sucediendo a mi, y se materializó a las 2 am. cuando estando en oración, llorando de rodillas, una voz y una gran luz iluminó la habitación, mientras claramente escuchaba;: "Pero yo te amo"...Cosa muy nueva para mi ya que nunca creí en videncias ni informaciones canalizadas en mi persona, y volví de mi estupor cuando el Padre Abad José María Martínez, osb muy cariñoso y sonriente a las 10 am. en nuestro primer encuentro, no me dijo que estaba loca, sino que inició su acompañamiento espiritual conmigo, hasta el presente, tiempo en el que han sucedido vivencias y hechos maravillosos. Nunca en los grupos me dijeron que dejara la Abadía, hasta que en 1994 me desprendí de ellos, por las exigencias que mi trabajo para la hospedería del monasterio, se hizo muy exigente.

Danza Sufi

Il Sufi a volte danza, ma, mentre danza, al centro rimane assolutamente immobile -- il centro del ciclone.

La danza è il ciclone, tutto il suo corpo è in movimento, è fluido, dinamico, ma al centro la coscienza osserva in silenzio, indisturbata e senza distrazioni. Esteriormente si può solo imparare l'esercizio.

Esteriormente non si conoscerà mai quello che accade dentro al danzatore. E la vera storia è tutta interiore."

¿Por qué giran los derviches? | Dervişler neden Sema eder?

Los derviches giradores no bailan simplemente. Su danza forma parte de una ceremonia mística muy compleja y llena de significados.

Video completo de la ceremonia del que he extraído las imágenes: https://www.youtube.com/watch?v=Qdi-i...

Sufismo: la vía del corazón y ahi empalmé con los monjes benedictinos, pues Gurdjieff colocaba como segunda instancia de la búsqueda, el camino del monje que es el camino del corazón. Me sentía plena, mis elementos culturales pertenecían a una sólida base común a las grandes corrientes espirituales, y no debía aislarme de mi familia, ni de mi esposo, ni de lo que fue mi formación, sólo continuar sintiendo la Presencia y aceptando el compromiso de la conversión contínua, a través de la observación y la disciplina en lo cotidiano, dentro del AMOR no de l fuerza que me exigía el trabajo en los barrios. El Dios de Jesús de Nazareth, comenzaba a develarse

El Eneagrama Sufi, por Abdul Karim Baudino, lo estudié en Guigue con el P. Beda Hornung, osb. en libros producidos en español por jesuitas que trajeron esa enseñanza a los que la buscaban.

Gurdjieff Sacred Dance - Ho Yah

Ho Yah - Dervishes with Hatchets

Performance on 8 July 2012 in Gwangju/South Korea by Seekers of Truth.

Dance no. 5 of 10.

Visit http://cafe.daum.net/dharmameditation for more information (in Korean).

We don't claim this Gurdjieff Movement presentation to be complete and correct (if such a thing exists). It is not our intention to convey the correct way of performing a Gurdjieff Movement through the internet.

Though the movements are extremely beautiful and designed with genius, their technicality is our second concern. For us they are a means to our primary concern, which is the inner process of the people performing them. For us Gurdjieff Movements are a means to be more conscious and aware, a technique of inner growth.

If something touches the audience and some seed is planted in them, we are happy about that too.

If anyone achieves to more than 20 sec of continuous self-awareness, that is wonderful. If anyone takes up the courage to strive for more than 30 sec on a daily basis, that is good enough to make our efforts worthwhile.

El Trabajo de Gurdjíeff no se basa exclusivamente en aspectos metafísicos o esotéricos. Lo metafísico y lo místico son características propias de la obra de Gurdjíeff, pero estos aspectos no constituyen todo su trabajo y esencia. También incluye enseñanzas sobre el hombre y su relación con la vida material.

Descendientes de sus discípulos como Nathalie de Salzmann de Etievan, diseñaron un modelo educativo teórico. En este contexto, el Sistema de Gurdjieff intenta ser aplicado para educar mentes pequeñas. Se pretende que el pequeño "desarrolle" lo que Gurdjíeff consideraba las principales esferas del ser: el cuerpo, el intelecto y las emociones.

En América Latina hay varios colegios que siguen el método Etievan, basado en la información de Gurdjíeff. Esta información va dirigida a adiestrar en niños y jóvenes su conciencia, llevándolos a "amar su trabajo, a esforzarse, a conocerse, a desarrollar su voluntad, a responsabilizarse por sus actos asumiendo las consecuencias de éstos, a expresar su sentir, a buscar la verdad dentro de su ser, a centrar su atención y a formar su conciencia, para cada día ser mejores y poder enfrentar las vicisitudes de la vida de una manera positiva".

Se considera que el Sistema de Gurdjíeff puede tornarse peligroso si se aplica incorrectamente. Gurdjíeff mismo advirtió esto en varias ocasiones. A pesar de los peligros, muchas escuelas continúan captando nuevos discípulos manteniendo un halo de misterio y atractivo para los incautos o interesados en el tema.

Otros discípulos señalan que una verdadera escuela de Cuarto Camino no hace demasiada publicidad, sino que debe ser encontrada. Esta es considerada la primera condición para poder entrar. El psiquiatra británico Anthony Storr, incluye un capítulo sobre Gurdjíeff y su Trabajo en su libro intitulado en Inglés "Feet of Clay: Saints, Sinners, and Madmen".

A principios de los 70s, había una escuela de Gurdjíeff en la isla caribeña de Carriacou que funcionaba como granja y monasterio, siguiendo los preceptos espirituales de Gurdjíeff. Pero fue destruida por la intervención del gobierno comunista de Cuba después de la revolución de 1977

Comunidad de monjes benedictinos de la Abadía "San José" de Guigue, con el II Abad Padre José María Martínez, (Vitoria, Alava, España 4 de febrero de 1947) mi maestro espiritual.

Para poder discernir la voluntad de Dios en nuestra vida, necesitamos buscar la verdad y estar dispuestos a aceptar el desafío, el cuestionamiento y la confrontación que trae consigo la verdad. El autoconocimiento es imprescindible en el discernimiento. Reconocer “de qué patica generalmente cojeamos” nos ayuda a distinguir las motivaciones egoicas camufladas como espirituales, de las que genuinamente provienen de la acción del Espíritu. Esto es lo que San Ignacio llamaba “discernimiento de espíritus.” A lo largo de todo el proceso de discernimiento es importante estar alerta a los gritos de agonía del falso yo que se niega a disminuir y, mucho menos, a morir. La consigna de nuestro falso yo es siempre: “Quiero lo que quiero en cuanto lo quiero.” Pero ya lo sabemos: es Dios quien nos va sanando y transformando, no nosotros mismos. Nuestro egocentrismo irá siendo purgado progresivamente a lo largo del proceso de la oración silenciosa y del discernimiento mismo, si no tratamos de escondernos tras falsedades o verdades a medias.

Los movimientos del corazón que proceden del discernimiento son sutiles y lo más que podemos decir acerca de ellos es que “parecen sugerirnos, parecen invitarnos…” Es decir, no debemos esperar respuestas rápidas y 100% seguras. Esto reforzaría irremediablemente nuestro centro de energía de seguridad y podría convertirnos en seres orgullosos, inflexibles y autoritarios (“Es así, porque tengo la verdad agarrada por la cola tras un proceso de discernimiento”). Frecuentemente, sólo al pasar del tiempo es que podemos percibir en su totalidad la sabiduría de la madeja de hilos que nos ha conducido por un camino específico.

El discernimiento nos abre a la conversión, al verdadero cambio, a convertirnos en nuestro verdadero yo: la persona hecha por Dios a su imagen y semejanza. Esta transformación diaria se va realizando, mediante la bondad y el infinito amor de Dios, en todas las pequeñas y grandes entregas o abandonos que hacemos a lo largo de nuestro proceso de discernimiento. “Aprenderás la verdad y la verdad te hará libre.” (Juan 8: 32). Algunas personas desean solamente o se conforman con verdades parciales, de modo que no se arriesgan o la racionalizan. Eso conduce a la autocomplacencia y a permanecer satisfechos, en el sitio confortable de siempre.

... Love is not love which alters when its alteration finds or bends with the remover to remove.

(No es amor el amor que se altera ante un tropiezo o se dobla ante el peligro)

William Shakespeare

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