TALLER CRÍTICO "MUJERES QUE MATAN" POR: ROBERTO LOVERA DE-SOLA
Demos un salto en el tiempo a propòsito del libro "HISTORIA DE LA PRESENCIA OCULTA Y FELIZ DE LAS MUJERES EN VENEZUELA. HITOS DE SU ACCIÓN A LO LARGO DE NUESTRO DEVENIR. Caracas 2013. ROBERTO LOVERA DE-SOLA que estamos publicando por entregas, para compartir el anàlisis sobre la novela de Alberto José Barrera Tyszka (n. Caracas, 18 de febrero de 1960) "Mujeres que matan" (Literatura Random House, 2019) es la nueva novela de Alberto Barrera Tyszka, donde se comprimen un thriller distópico, un suicidio, un país colapsado en manos de un alto mando populista y un club de lectura donde las mujeres pueden llegar a matar para no morir de, lo que podríamos decir, enfermedad social. La narración comienza con el suicidio de Magaly Jimenez, ahogada en su bañera, como lo ilustra la portada del libro, y continúa con su hijo Sebastián buscando respuestas a la muerte de su madre. El autor introduce, además, preguntas claves como cuán injusto puede llegar a ser un país violento para las mujeres; también aborda el género de la autoayuda y cómo este se convierte en una especie de populismo narrativo que se impone comercial y empáticamente frente a la “alta literatura” y, a su vez, cómo ese populismo narrativo puede ser tan válido para un lector como un libro con altos recursos literarios. Mujeres que matan reivindica principalmente lo femenino y dos de sus polos: la sensibilidad y la rabia. La narración nos comprueba que todo aquello que callan las mujeres un día puede volcarse en violencia y, a su vez, en liberación, generando así cuestionamientos éticos para los personajes.
Alberto José Barrera Tyszka (n. Caracas, 18 de febrero de 1960) ha creado con su libro Mujeres que matan(Caracas: Ediciones Curiara,2019.207 p.) una de las grandes novelas venezolanas, esta lo pone al lado de nuestros siete más destacados novelistas de estos días, a partir de 1972 10 . Desde luego no dejamos de lado a sus otras invenciones La enfermedad(2006), Rating(2011) y Patria o muerte(2015) que es la obra sobre el trágico protagonista de estos años, y sobre la violencia que se vive en la Venezuela de estos días. Sus bien paridas ficciones breves de Crímenes (2009) tocan ese suceder, de ellas nació Patria o muerte 11 .
Existe una primera novela suya: También el corazón es un descuido(2001) 12 la que Barrera considera mero balbuceo. Pero esta habrá que releerla para hallar sus primeras huellas en el género que son las que explican sus muy buenas creaciones posteriores, a partir y desde La enfermedad.
En su soberbia novela “Mujeres que matan” los venezolanos de hoy, que por tantas razones sufrimos, nos miramos como ante un espejo. Pero esta, está tan bien tramada que quien lea sus primeras cinco páginas no podrá cerrarla hasta arribar su última línea.
Es Mujeres que matan narración diáfana, pese al gran drama en el que ingresamos al leerla, obra límpida en su preciso estilo, clara. Nos ofrece una percepción muy profunda de la psicología de sus personajes, mujeres la mayoría con excepción de un hombre. El libro sucede en la ciudad en que estamos viviendo, la que sufrimos cada jornada(p.46). Al volumen lo llena una honda mirada de mujer(p.116) y a la vez nos pone ante una atmósfera mas que sexual es erótica, con la aparición de esas mujeres que hoy se denominan entre ellas las heteroflexibles, o bicuriosas,* como dicen otras.
*Cuando eres bisexual, estás interesada en algo más que sexo. Te da lo mismo tener novio o novia, porque estás abierta a enamorarte de ambos géneros. En cambio, si eres ‘bicuriosa’, simplemente te gustaría probar el sexo lésbico algún día, si se presenta la oportunidad, con alguien que te inspire suficiente confianza como para vencer la timidez sin sentirte juzgada. Otro término para ‘bicuriosa’ es ‘heteroflexible’, ya que se trata de personas que son preferentemente heterosexuales, pero que bajo ciertas circunstancias pueden tener encuentros íntimos con personas de su mismo sexo sin llegar al enamoramiento o a una relación de pareja. También se puede ser ‘bicuriosa’ u ‘homoflexible’ cuando eres preferentemente lesbiana pero de vez en cuando se te antoja estar con un chico, y eso no te hace bisexual ni heterosexual.
Una chica 'bicuriosa' puede expresar su interés a través de coqueteos, besos, caricias, masturbación, sexo oral o un acto sexual completo. Eso no significa que cambiaron sus preferencias, por el contrario: estos encuentros incluso sirven para reafirmarlas aún más.
Viviendo los venezolanos en las dos últimas décadas sin orden político-social alguno, en medio de la anarquía y del desorden, sin practicar las leyes, menos para aplicárselas a sus antagonistas, es imposible que todo escritor auténtico, y Barrera lo es, pueda sustraerse a lo que sucede entre nosotros, lo que antes nos hice comprender en sus cuentos de Crímenes o en su novela sobre la violencia gubernamental que padecemos Patria o muerte, o en sus magnificas crónicas para El Nacional 13 , no pudiera haber dejado de tratar aquello que nos tiene tan heridos a los venezolanos.
La urbe en la que vivimos, siempre en medio de la violencia, está muy bien pintada, tal cuando leemos: “La familia que buscaba comida en la basura tampoco aparecía nunca en las noticias. Tampoco podían verse las marchas de protesta, la gente que detenían, los estudiantes que desaparecían o quedaban muertos sobre las calles. El Alto Mando decía que todo eso no era real, que lo que los ciudadanos veían y vivían sólo era una ficción”(p.19), “puentes caídos, grietas en las calles, tuberías rotas, incluso en algunos barrios, hacia el sur, todo el alumbrado eléctrico se había venido abajo. La devastación parecía tener un libreto”(p.71. Subrayado nuestro). Con tales vivencias urbanas: “En ese momento, Inés quería contar su historia: a veces me despierto en las mañanas y me cuesta diferenciar qué disparos sonaron en el sueño y qué disparos sonaron en la calle, todos son tan reales, ya no importa donde estén…Yo los oigo todo el tiempo, despierta o dormida,,,Ahora las balas son nuestro reloj interno, como si todos lleváramos un cronómetro que va contando los disparos”(p.197)
Por ello dentro Mujeres que matan leemos: “destapó una locura, sacó a flote dolores, rabias, deseos, delirios”(p.190). Y a medida que pasamos sus páginas, que nos mantienen pegados a nuestra sillón de leer, nos vamos dando cuenta que estamos ante una grave historia del acontecer cotidiano de un país en honda crisis, controversia pública, con numerosos presos políticos y asesinatos de personas disidentes.
Esto faltando, en todo momento, a toda hora a la Constitución vigente en la cual se lee: “Los ciudadanos y ciudadanas 14 tienen derecho a manifestar, pacíficamente y sin, armas, sin otros requisitos que la que establezca la ley. Se prohíbe el uso de armas de fuego y sustancias tóxicas en el control de manifestaciones pacíficas. La ley regulará la actuación de los cuerpos policiales y de la seguridad en el control del orden público”(Artículo 68).
Cuando abrimos “Mujeres que matan” nos encontramos con una madre que escribe una despedida a su hijo, que estudia en el exterior, y luego se suicida deprimida por todo lo que sucede cerca de ella. En su despedida ella le dice:”No creo que entiendas ni aceptes esta despedida. Espero que la rabia no te dure mucho y que luego me perdones”(p.13-14). Y en segundo mensaje: “Perdóname, mi amor. Perdóname todo lo malo. Perdóname también esto, por favor”(p.15), tras lo cual se ahoga en la bañera de un hotel. A poco él viaja a Caracas para reconocer el cadáver, enterrarla e investigar los por qué de su drástica decisión. Tal el final de Magaly. “Tu madre empezó a sentir que todo estaba mal. Que respirar dolía. Que estar viva no tenía ningún sentido”(p.200).
En el período anterior de morir por voluntad propia, ya muy reprimida, esta profesional se acerca una psicóloga en busca de ayuda. Esta le sugiere formar parte de un Grupo de Lectura. Allí comienza la parte del libro que podemos considerar intensamente femenina, ya que estas damas se reúnen para reflexionar sobre su propia condición y a leer libros escritos por mujeres, tan abundantes hoy en América Latina donde nuestras escritoras ocupan un singular lugar en nuestras letras, nombres como los de la colombiana Laura Restrepo, las mexicanas Laura Esquivel y Ángeles Mastreta, la chilena Marcela Serrano y la venezolana Ana Teresa Torres han dejado su impronta en sus obras para la comprensión del ser femenino. También, desde luego, hay algunos hombres, aquellos sensibles que pidió nacer Anais Nin (1903-1977) y ahora Barrera, sienten necesidad de penetrar en los universos mujeriles y dejar su palabra comprensiva.
Es tal aquello que en “Mujeres que matan” leemos sobre el ser femenino en medio de esta desvirtuada Venezuela donde en Caracas sucede la novela: “las mujeres debemos aprender la diferencia que existe entre la felicidad y una felicidad. Tenemos que dejar de soñar en general y aprender a soñar en particular…De tanto soñar en grande, nos olvidamos de vivir en pequeño”(p.155. Subrayado de Barrera); “Teresa, feliz, cometió el único desliz de toda la actividad: le dijo a su hermana una parte de la verdad, le dijo que estaba bien porque iba a hacer justicia, porque se iba a vengar de todo lo que le habían hecho a ella”(p.163), ella mató a una oficial del ejército que estando presa ella la había hecho violar, varias veces, por otros compañeros militares, ello en presencia suya. Este pasaje nos recuerda que en 1919 después de la conspiración de aquel año el general Gómez dirigió, tras una cortina, las torturas a los implicados, dirigiéndola dando con su bastón en el suelo, lo que ponía en acción a los trituradores. Esta mujer de Mujeres que matan buscó y eliminó a su carcelera, le aplicó la pena de muerte, en un país que esta no existe del 18 de agosto de 1863, mientras lo hizo sus otras compañeras del Círculo de Lectura siempre solidarias la acompañaban y escucharon el disparo justiciero.
También estuvieron presentes “Cuando Leonor mató a Diego Ponte y todas decidieron apoyarla y encubrirla, Inés comenzó a preocuparse.
Vio un hilo delgado, pero muy potente, que podía enlazar esa experiencia y la futura muerte del marido de Adriana. Temió que lo peor sucedería”(p.194). Mató a Diego por los maltratos sexuales sufridos por parte de aquel, su amante.
En las últimas décadas los Círculos de Lectura ocupan un lugar en nuestra actividad cultural, hechos para divulgar la lectura de los mejores libros, están, la mayoría, formados por mujeres dado el valor de lo que ellas hacen en la sociedad, más en el caso venezolano en que la oposición a la dictadura es casi siempre protagonizado por mujeres, en todo ello los logros del feminismo ha fecundado. El feminismo fue formado entre nosotros el 30 de diciembre de 1935, a los trece días de la muerte del dictador Gómez. En los Círculos de Lectura se suscitan muy buenas amistades, sobre todo entre mujeres, lo sabemos por haber formado varios 15 .
Las que se reúnen, y vemos atravesar las hojas de “Mujeres que Matan”, lo hacen estando en medio de aquello tan difícil que pasa entre nosotros. De allí que nos encontremos con los que para vivir en paz desean irse como aquel hermano de una muchacha asesinada por la policía en una manifestación: “Julio le confesó a Inés que él tampoco quería permanecer más en el país, que todo lo recordaba a su hermana Irina, que esa ciudad no era una ciudad sino una muerte disfrazada de calles y de edificios, que aunque no tuviera 18 años le permitiera por favor irse con su padre. Inés dijo que si sin pensarlo”(p.88). Ello explica los miles de venezolanos que a pie han huido cruzando las fronteras con Colombia y con Brasil.
En el Círculo de Lectura “había pasado lo que le pasaba a todo el mundo en el país. Adriana y su marido se quedaron sin trabajo y tuvieron que emigrar, Leonor se vio obligada a regresar al barrio popular de donde había salido. Teresa encontró una forma de escapar por la frontera y se liberó de su régimen de presentación judicial. Al final, quedamos sólo Magali y ella”(p.201). “Magali me avisó, dijo: “Inés…Los suicidas siempre avisan”(p.201). “Les explicó cómo a partir de ahí la misma dinámica de ellas se había ido transformado. No dejaron de ser amigas, pero también fueron algo más: cómplices”(p.191). Además: “El club había pasado lo que le pasaba a todo el mundo en el país. Adriana y su marido se quedaron sin trabajo y tuvieron que emigrar, Leonor se vio obligada a regresar al barrio popular de donde había salido. Teresa encontró una forma de escapar por la frontera y se liberó de su régimen de presentación judicial. Al final, quedamos sólo Magali y ella”(p.201).
“Explicó que cuando empezaron las manifestaciones y los militares ocuparon las calles, todo cambió. Luego aparecieron los grupos armados”(p.197), suponemos que recordaba la gran matanza originada ante las protestas de 2017. En uno de aquellos días Irina, la hija de una de ellas, fue asesinada frente a su propia mamá que contempló atónita el hecho. Comprendió: “los muertos no hablan. No existen, no tienen nada qué decir. Es al revés. Hay que saber escuchar lo que nunca dijeron”(p.43).
La esencia de lo que leemos en esta novela parte del encuentro de una estudiante de Artes y del hijo de la suicida, quien piensa hacer una película como tesis de grado. Y al presentar su proyecto su “Su tutor le habló del país, de la crisis, de la violencia, de los estudiantes que estaban presos”(p.51) como tema para su film. Eligió entonces el tema de los muchos suicidios de mujeres que se estaban presentando.
Por eso se acercó al hijo de Magali: “Apenas se sentaron comenzó a hablar de su proyecto sobre mujeres suicidas…Creo que es un síntoma”(p.37), son “Mujeres que se rompen sin que nadie se entere.
Mujeres que ya no pueden más y se destruyen”(p.39); “Elisa repitió que se trataba de un síntoma. Pensaba que las mujeres suicidas eran otra señal de todo lo que se estaba ocurriendo en el país. Quería que Sebastián le permitiera entrar en el departamento de su madre, que la dejara entrar y revisar, curiosear, hurgar entre sus cosas, buscando tal vez alguna pista, un indicio. Deseaba, también, que le permitiera filmar. Quería entrar con su cámara y dejar registrados todos los detalles posibles”(p.40).
Otra parte de lo que leen y discuten el Círculo de Lectura ante las obras de autoras femeninas que leen tiene que ver con los hombres.
“Su marido era un hombre básico. Nada de lo que le pasaba o de lo que ocurría a su alrededor, le genera alguna pregunta…pensaba que el sexo era la única intensidad posible entre un hombre y una mujer.
Esa era la única aspiración de su vida. Quería coger más con su mujer. O quería coger más en general, en su vida, y sentía que su mujer debía resolver ese problema; que Adriana estaba allí para eso, que ella le quedaba cerca y era gratis”(p.192-193). Otra reflexionaba así: “Elisa pensaba que los hombres no tenían ninguna capacidad para entender la naturaleza femenina. No era un reclamo, ni siquiera un cuestionamiento o una crítica. Sólo era un diagnóstico. Creía que la mirada masculina estaba genéticamente incapacitada para observar y ponderar, en toda su complejidad, a las mujeres”(p.41).
Septiembre 14,2020
CITAS BIBLIOGRAFICAS:
10. Estos son Francisco Herrera Luque, Eduardo Liendo, Francisco Massiani,, Ana Teresa Torres, Federico Vegas, Francisco Suniaga y Boris Izaguirre. Ana Teresa Torres es hoy nuestro mayor novelista, muertos todos los maestros del género.
11. Y desde luego de su “Hugo Chávez sin uniforme”, Prólogo: Teodoro Petkoff. Caracas:Debate, 2004. 413 p. escrito al alimón con Cristana Marcano.
12. Alberto Barrera Tyszka: También el corazón es un descuido. Barcelona: Plaza y Janés, 2001.200 p.
13. Tal su Alta traición. Caracas: Debate,2008.238 o, crónicas que son ejemplares como creación y como análisis.
14. No sabemos porque no se ha señalado que la constante mención a los hombres y las mujeres, los ciudadanos y las ciudadanas, a lo largo de esta Constitución es un error gramatical, lo que nos indica que los que la redactaron no tenían ninguna formación gramatical, ortográfica, y, desde luego, sintáctica. Ver sobre ello la Nueva gramática de la lengua española. Madrid: Real Academia Española de la Lengua. 2010.993 p. Ver la p.25
15. Hemos estudiado lo que son en nuestra ponencia: “Memoria del Círculo de lectura”, en Varios Autores: Las peñas y las tertulias: puentes de saber, cultura y cordialidad. Idea y edición: Heraclio Atencio Bello. Caracas: Fundación Venezuela Positiva, 2012,p.487-504.También fue publicado en www.arteenlared.com; Caracas: agosto 23,2011.
El libro Las peñas y las tertulias puentes de saber, cultura y cordialidad, editado por la Fundación Venezuela Positiva se presentó en una noche donde la conversación se convirtió en protagonista.
Como principal anfitrión fungió Heraclio Atencio Bello, presidente de la Fundación, quien aprovechó para agradecer la colaboración de los coautores de todo el país, quienes pusieron un granito de arena para hacer posible esta nueva edición. Algunos de ellos son Alexis Márquez Rodríguez, Luis Ugueto Arismendi, Rodolfo Izaguirre y Carolina Figueredo, entre otros participantes en esta obra singular.
Sobre ese tema que a tantos gusta les copio lo que Roberto Lovera De Sola dijo:
¿Cómo surgieron Los Círculos de Lectura y las tertulias que diriges y que están contribuyendo a abrir el camino a nuevos escritores?
_Eso surgió un poco de mi colegio La Salle. Nosotros teníamos ahí Círculos de Estudio, donde estudiábamos muchas cosas como el Marxismo, el Concilio Vaticano Segundo, la Teoría de la Liberación. Después con los años tuve una amiga que ahora vive en La Victoria, Yolanda Ramón, que cuando nos conocimos ella tenía el grupo Tarima y después formamos otro que incluso funcionó en mi casa, de allí surgió el de la Fundación Herrera Luque y de allí surgió el otro Círculo que se llama Los tertulieros se reúnen, que es para promover la lectura. Después, gracias a María Elena Lavaud entré a Globovisión a esa sección que suelo hacer y también he estado en la radio con ella.
_¿Como seleccionas los textos que serán presentados?
_Trabajo mucho leyendo originales. Eso forma parte de mi trabajo, he ayudado a corregir obras. Hay mucha gente escribiendo. Las crisis de las editoriales del Estado han hecho que vuelvan las ediciones personales. En las comerciales, aunque toda editorial es comercial andan buscando los que más venden.